Hoy es por desgracia un día muy triste para el mundo de las motos. Esta mañana nos hemos quedado, la mayoría de los aficionados a las motos, de piedra al encontrarnos con la noticia de la muerte del piloto de MotoGp Marco Simoncelli en plena carrera en el circuito de Sepang en Malasia, mismo circuito dónde se proclamó campeón del mundo en la cilindrada de 250 cc.
La verdad sea dicha, no era santo de mi devoción. Desde luego tengo que reconocer que no era mal piloto, pero dejaba mucho que desear en lo que a ' carrera limpia ' se trataba.
Ha sido un chico polémico, pero también, un chaval de 24 años que ha dejado una familia destrozada y que no merecía morir tan joven por muchas temeridades que hiciera en su momento. Se ha ido uno de los grandes del motociclismo actual haciendo lo que mejor sabía hacer, compitiendo sobre su Honda.
Hoy Iloramos la muerte de un joven que tenía toda una vida por delante, pero hay que pasar página y seguir disfrutando de muchas carreras más.
Descansa En Paz Marco ... o cómo te solían llamar tus allegados CIAO SUPER SIC